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Una nueva realidad exige formas distintas de pensar el día a día, la cotidianidad de los colaboradores y la incidencia que esto trae para la gestión de recursos humanos. Daniel Montalvo, Docente del MBA y Vicepresidente de Recursos Humanos de Diners Club, nos brinda cinco aspectos claves que son necesarios considerar en esta actualidad.

 

  1. Relacionamiento laboral distinto. Se cancela la hora del café en las oficinas, el cotilleo entre compañeros, las reuniones eternas en una sala entre cinco o más personas. Y, quizá todo esto, nos lleve a ser más eficientes, a ir directo al grano, a revisar más temas y a avanzar con objetivos en un mismo día o semana.

 

  1. Un rol de trascendencia. En este camino de cambio, el área de talento humano se convierte en esencial e incluso puede ser la que determine la sostenibilidad de la empresa “Hoy más que nunca hay que cuidar al capital humano”, nos recuerda Daniel. La nueva realidad necesita de un camino conductor que viene de la mano del área de recursos humanos. Ahora más que nunca hay que reforzar la conexión entre personas y empresas. La comunicación debe ser clara, sencilla, directa y sostenida. Además, si se enferma un grupo de personas y no existe reemplazo, se puede afectar severamente la producción. No es posible divorciar a las personas del negocio, ambas caminan juntas. Si se cuida a las personas, se está cuidando al negocio.

 

  1. Recuperar los negocios. Recursos humanos también tiene a su cargo esta misión y para ello puede plantear nuevas estructuras menos jerárquicas y más planas. Es necesario redefinir las funciones de los trabajadores y apoyar al equipo con herramientas tecnológicas y digitales. Es un buen momento para dar pasos en la profesionalización de los gestores de talento humano, así como en la automatización y optimización de recursos.

 

  1. Un cambio radical en la cultura organizacional. La era del jefe que vigila a sus colaboradores terminó. Si antes la función principal era controlar, hoy es confiar. Y para ello se deben definir claramente objetivos, tareas y plazos para cumplirlos; además de permitir al trabajador gestionar responsablemente la manera, el tiempo y los horarios para conseguirlo.

 

  1. Compensaciones transformadas. Uniformes, alimentación, beneficios, celebraciones o viajes eran parte del esquema que se venía manejando hasta antes de la pandemia. Hoy, todo es distinto, la mayoría de esas actividades no pueden llevarse a cabo con la normalidad de antes. Por eso, Daniel aconseja revisar otras necesidades de los colaboradores, por ejemplo: cómo están equipados sus espacios de trabajo en casa, si cuentan con escritorios, sillas ergonómicas, acceso a internet, suficientes minutos o datos en su celular.

 

Profundiza sobre este y otros temas estratégicos en la dirección de negocios con la Maestría en Administración de Empresas – MBA de la UDLA.

 

 

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