Inicia 2020 y llegan los propósitos de nuevo año . ¿Carro nuevo? ¿Viajes? ¿Vacaciones? Seguramente, ya planificas tus actividades; al fin y al cabo, el estudio puede esperar, no pasa nada, ya habrá tiempo para hacerlo… La realidad es que el mundo no se detiene: las empresas se reinventan, la tecnología avanza, es tiempo de grandes cambios y transformaciones. De hecho, mientras tú sigues postergando esta decisión, profesionales con otro sentido de urgencia se preparan para ser parte de la innovación, para crecer, para seguir adelante. Hoy, las personas que triunfan en la industria, son aquellas que están al día y trabajan por actualizar sus herramientas, sus conocimientos, sus competencias. ¿Todavía te preguntas si es momento de seguir un posgrado? Sí, y siempre es tarde para hacerlo.
Toma en cuenta que, cuando estás en tu zona de confort, existen personas que persiguen sus sueños, que luchan y se esfuerzan por desarrollar ese algo más que tanto buscan las empresas. En la actualidad, las organizaciones, en su afán por mantenerse competitivas, reclutan a aquellos profesionales capaces de proponer nuevas soluciones, nuevos mercados, nuevas formas de hacer las cosas.
Al respecto, si bien es importante el aprendizaje autónomo y las lecturas por cuenta propia, no debes descuidar la educación formal, estructurada, esa que solo se adquiere en las aulas.
A continuación, compartimos cuatro aspectos por los que estudiar un posgrado, debería ser tu propósito, tu prioridad a cumplir durante el próximo año.
- Sé mejor en tu trabajo: aun cuando haces tu trabajo muy bien, siempre existen actividades en las que puedes mejorar; es decir, siempre está esa incomodidad positiva que te alienta a realizar las cosas de manera distinta. Si sientes que podrías adelantar tus actividades bajo otra perspectiva o que todavía hay mucho por conocer, una maestría es el mejor camino para prosperar personal y profesionalmente.
- Un verdadero desafío: si te gustan los retos, una maestría es tu mejor opción. Al término del programa y luego de un año lleno de sacrificios, tendrás la satisfacción de haber alcanzado una meta distinta. ¿Por qué? Complementaria a la satisfacción personal, está el hecho de que ahora eres mucho más competitivo, más preparado, más abierto al mundo.
- Atrévete a más: una maestría no se queda en el título. El cartón está bien para adornar una pared, pero no tu vida. Un posgrado implica la decisión de crecer, de aprovechar todos los conocimientos y aplicarlos en tu camino al éxito.
- Aprende de los mejores: los docentes a nivel de maestría, son expertos de reconocida trayectoria profesional. Su guía, su consejo, su experiencia en la industria, es esencial para tu crecimiento.
Al estudiar un posgrado, se reduce el tiempo en familia e interrumpen jornadas de trabajo. Sin embargo, tenemos la certeza de que es la decisión que más beneficios representa a futuro. Más aún, si se considera la creciente demanda por aquellos profesionales que, además de amplias competencias técnicas, poseen la capacidad para coordinar equipos y encaminarlos hacia la consecución de resultados.
Es así que la Universidad de Las Américas ha diseñado una sólida y completa oferta de posgrado que, mediante la resolución de casos reales, los simuladores y las metodologías prácticas, promueven en ti la destreza para crear propuestas de valor, resolver problemas y tomar decisiones estratégicas de negocio.
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Giuseppe Marzano
Decano de la Facultad de Posgrado
